Médicos Radiólogos

Ecografía osteoarticular

Los estudios de ecografía del sistema osteoarticular presentan una cierta complejidad en su realización práctica y en la precisión sobre los diagnósticos. Esta complejidad, muchas veces está sostenida por un cierto temor de los radiólogos hacia la patología musculoesquelética, temor que debemos dejar de lado. Para cualquier cosa que querramos realizar y aprender necesitamos en primer lugar un conocimiento anatómico, luego buenos libros de texto para comenzar el estudio, saber dónde profundizar y sistematizar el trabajo para no pasar nada por alto. La idea de este artículo es sugerir algunos libros de texto y protocolos de trabajo que faciliten el acercamiento de los radiólogos a este área. Por otro lado, cada radiólogo debe conocer el equipo (ecógrafo) con el cual trabaja, sus limitaciones y sus herramientas, ya que es a través de ese equipo que podrá realizar los estudios de la mejor forma posible.

Es importante señalar dos cosas sumamente importantes respecto de la ecografía articular, que son centrales a la hora de realizar los diagnósticos: una, que el paciente está con nosotros mientras hacemos el estudio, razón por la cual podemos interrogarlo, realizarle maniobras, revisarlo, etc., y la otra, que la gran mayoría de las veces, tenemos un lado sano con el cual comparar, es decir, un reparo anatómico (a excepción de que la patología sea bilateral). Si tenemos en cuenta estas dos cosas, llegar al diagnóstico será mucho más sencillo.

Respecto a la sistematización de los estudios, sobre todo al inicio, es necesario establecer un orden que nos permita revisar todas las estructuras anatómicas relevantes de la región. Esta sistematización a través de protocolos de trabajo es recomendable tanto para estudiar al paciente como para enseñar a otros médicos, y debe ser propia, es decir, creada por cada uno, que nos permita trabajar cómodamente y no quede nada sin ser evaluado. Existen protocolos creados por distintas sociedades o autores que resultan útiles como guía. Ofrecemos aquí los de la Sociedad Europea de Radiología Musculoesquelética, para las distintas regiones anatómicas:

Teniendo ya el conocimiento anatómico y la sistematización del trabajo, es necesario contar con libros especializados para profundizar el conocimiento, estudiar las lesiones y aprender a reconocerlas. Dos de los mejores libros para este propósito son:

Ultrasonografía Musculoesquelética, de Eugene McNally
Ultrasound of the Musculoeskeletal System, de Bianchi y Martinolli

El primero es un libro más práctico y de lectura más sencilla que da numerosos «tips» para la práctica cotidiana, además de la patología frecuente, metodología de estudio y protocolos; es recomendable como primer lectura. El segundo es recomendable luego de tener cierto conocimiento y práctica, y profundiza un poco más sobre las patologías diversas y su modo de detección.